Colecciones fotográficas

Estambul. Entre Europa y Asia

Bizancio / Constantinopla / Estambul

 

   Y ve el capitán pirata,
   cantando alegre en la popa,
   Asia a un lado, al otro Europa,
   Y allá a su frente Estambul.

   José de Espronceda

 

 Estambul   

   La prestigiosa polis de Bizancio fue fundada a mediados del siglo VII a C por gentes venidas de Megara y de Argos, comandadas por dos héroes llamados Byzas y Anto. Tal afirman los escritores antiguos, y los hallazgos protocorintios en las excavaciones arqueológicas realizadas en el palacio de Topkapi de Estambul, que ocupa el lugar de la acrópolis de Bizancio, parecen confirmar esa datación.
   El emplazamiento era inmejorable para el control estratégico del tráfico marítimo entre Propontis (el Mar de Mármara) y el Ponto Euxino (el Mar Negro), a través del estrecho del Bósforo. La acrópolis se situaba sobre un promontorio que domina la boca sur del Bósforo, a orillas de un estuario (el 'Cuerno de Oro') que desemboca en el estrecho. Las remansadas aguas del estuario, que contrastan con las corrientes turbulentas del Bósforo, permitieron la construcción de un bien resguardado puerto, cuya entrada se podía cerrar tendiendo unas cadenas de una orilla a otra de la desembocadura.
   Bizancio fue agrandada y guarnecida de potentes murallas por el emperador Constantino hacia 330 d C, y de 395 en adelante gobernó como capital del Imperio Romano de Oriente. Rebautizada con el nombre de Constantinopolis, alcanzó su apogeo en el siglo VI, bajo Justiniano. Contaba por entonces con la mayor iglesia de la cristiandad: la basílica de Hagia Sophia o Santa Sofía (foto43). 
   Asediada durante siglos, primero por los turcos selyúcidas, luego por los turcos otomanos, Constantinopla resistió como un último bastión del cristianismo en las tierras islamizadas de Oriente, hasta que en 1453 fue capturada por el sultán Mehmet II Fatih ('fatih' en turco = conquistador), y pasó desde entonces a llamarse Estambul (Istambul). Así se extinguió la postrera y vacilante llama de lo que había sido el Imperio Bizantino, absorbido desde entonces por el Imperio Otomano, con Estambul como su nueva capital.
   El valor universal de Estambul reside sobre todo en sus incomparables paisajes urbanos, que ponen de manifiesto la larga interacción que se dio durante dos mil años entre Europa y Asia, integrando en sus barrios grandiosos edificios producidos por el genio creativo de arquitectos primero bizantinos y luego otomanos. La basílica cristiana de Santa Sofía, con su gigantesca cúpula que parece flotar sobre semicúpulas (un audaz alarde de ingeniería para el siglo VI), sirvió de modelo de inspiración un milenio más tarde para orarios musulmanes como la Mezquita de Sehzade, la Mezquita de Solimán (ambas obras, diseñadas por Sinan, son momentos cumbre de la arquitectura otomana del siglo XVI), la Mezquita Azul, del siglo XVII, o la Mezquita Nueva cercana al puerto, completada en 1664. Mencionemos también, entre los innumerables monumentos que jalonan Estambul, el complejo Fatih, del siglo XV, y el Palacio de Topkapi, que fue continuamente agrandado hasta el siglo XIX.

 

 

Continuar:  Vestigios de Constantinopla  >>

 

 

FotoCD120 

Estambul
Entre Europa y Asia

© Eneko Pastor
© Agustín Gil Tutor
  
© Copyright fotoAleph.
All rights reserved

www.fotoaleph.com
  
  
  
  


   

 

Otras colecciones de fotos de Turquía en fotoAleph

Turquía rupestre
El arte de los acantilados 

Turquia rupestre

Turquía clásica
Arte grecorromano en Oriente

   
TURQUIA CLASICA 
Turquía cristiana
   
Turquia Cristiana 

Estambul
La ciudad infinita

   

Estambul
Mítica y legendaria

   
Estambul
Capadocia
La tierra de los prodigios

  
Capadocia

Nemrut Dagi
La montaña de los gigantes

   
NEMRUT DAGI