Los colores de Cuba
Carros
Indice de fotos150. Trinidad
Tomaron un coche de alquiler, tirado por un caballo flaco que el cochero impulsaba hacia adelante –estaba como dormido– con una espuela puesta en punta de vara, pasando entre enormes casas amodorradas, que olían a tasajo, a melaza, a humo de torrefacciones, arrojando aquí, allá, según entrara la brisa del puerto, vahos de azúcar prieta, horno caliente y café verde, en un vasto respiro de establos, talabarterías y moho de viejas murallas, aún frescas de rocíos nocturnos, salitres y musgos.
(Alejo Carpentier, El recurso del método)
© Agustín Gil Tutor